GAVIOTAS, Por la recuperación de la piel vegetal de la tierra.
Se inicia una nueva forma de pensar en el mundo. Una era que Mario Calderón Rivera, sobresaliente pensador y humanista, denominado Renacimiento -en el sentido del renacimiento italiano- como un cambio de mentalidad del hombre hacia sí mismo y en el sentido del renacimiento contemporáneo como un cambio de mentalidad del hombre hacia la naturaleza que lo alberga.
El Renacimiento, guiado por el pensamiento genial de Leonardo Da Vinci, "Todo viene de todo, todo está hecho de todo y todo regresa a todo" máxime en un planeta redondo, se viene a concretar también en el Centro Las Gaviotas en donde se logró, entre otras de sus realizaciones, el renacimiento de la selva amazónica en las sabanas de la Orinoquia colombiana.
Allí se vincula el bienestar de la comunidad con la riqueza generada por el aprovechamiento sustentable de su biodiversidad tropical, que por estar ubicada en la zona ecuatorial, tiene uno de los mayores indices de productividad biológica. Dentro de este contexto, Mario Calderón nos pone a viajar por el pensamiento que a partir de los años cincuenta comienza a reflexionar acerca de la acción del hombre sobre la Tierra. Consiste en una nueva actitud con la naturaleza, haciendo parte de un mismo sistema en el que pueden convivir sin destruirse, entendiendo sus conexiones, es decir, su complejidad. El tiempo de Gaviotas es precisamente esta otra forma de pensar.
El autor, en homenaje a Gaviotas y a su fundador Paolo Lugari, fundamenta teóricamente el avance que la humanidad ha realizado en este sentido a partir del siglo pasado.
Gaviotas es un ejemplo, un camino, pero al mismo tiempo es un puesto de avanzada de una biocultura que se abre paso para defender tanto la vida humana como las otras, que finalmente están supeditadas a la recuperación de la piel vegetal de la Tierra mediante el incremento de la biomasa, pues de esta depende la estabilidad dinámica de la composición de su atmósfera que en un 99% está formada por nitrógeno y oxígeno, y que al ser alterada por la permanente disminución de su biomasa haría inviable la vida humana -algo mucho más grave que el recalentamiento global-. El simple recalentamiento termina siendo un análisis reduccionista, restringido.
El desarrollo se concibe ahora en armonía productiva con la naturaleza sin socavar los cimientos mismos de la civilización.
Con un amplio conocimiento de os autores que han formulado las tendencias del pensamiento ecológico de nuestra época, contextualiza a Gaviotas en el mundo actual poniendo de relieve sus aportes conceptuales, así como sus innovadoras realizaciones, apuntando siempre a un estilo de vida sin negar la modernidad.