Carbono y nitrógeno son dos elementos de crucial importancia en muchos procesos ecológicos naturales, mismo en situaciones de ambientes impactados. En los suelos, la situación non es distinta, porque aspectos acerca de la cantidad e de la calidad de ambos elementos en los suelos son indicadores de la calidad de un suelo de mucha importancia. Dependiendo de las características inherentes del suelo y de la forma y de la intensidad de manejo, los ciclos del carbono y/o del nitrógeno en los suelos pueden ser profundamente cambiados.