El trabajo que presentamos parte de la convicción que el Estado tiene un rol clave que desempeñar en la sociedad hondureña. Esta convicción se ha ido debilitando en los últimos 25 años entre aquellos sectores dominados por la ortodoxia neoliberal.
Sin embargo, la experiencia histórica muestra que ningún país ha prosperado en los últimos tiempos sin un Estado capaz de gestionar activamente el proceso de desarrollo.
“Las extraordinarias transformaciones de países como Corea del Sur, Taiwan, Bostsuana o Mauricio”, subraya un autor, “han sido dirigidas por Estados que garantizan salud y educación para todos y que promueven y gestionan activamente el proceso de crecimiento económico”.