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El marqués del Pico Francisco Marcos de Velasco (1635-1693): gobernador del castillo de Amberes y coleccionista
註釋

Francisco Marcos de Velasco (1635-1693) protagonizó un espectacular ascenso social desde unos orígenes hidalgos humildes hasta llegar a ser gobernador de la ciudadela de Amberes en 1679 y marqués del Pico de Velasco en 1684. El medio utilizado para su meteórica carrera fue el ingreso en la red clientelar de los condestables de Castilla, mediante un supuesto común origen familiar, y la carrera profesional en el ejército, en lo que seguía a otros miembros de su familia directa. Vivió en años muy difíciles para la monarquía hispánica en la Europa del Norte. Años en los que prosperaron hombres hechos en la milicia, como su antagonista Francisco Antonio de Agurto, pues bastantes miembros de la alta nobleza española se retiraron o eludieron la gobernación de Flandes. El marqués del Pico aspiró sin éxito al gobierno de los Países Bajos y de Cataluña. Durante sus largos años de residencia en Bruselas y Amberes formó una colección de tapices y cuadros flamencos que conocemos por la almoneda de sus bienes. Sus testamentarios ordenaron construir en la iglesia de la ciudadela una capilla con un retablo y un monumento sepulcral, realizaciones del escultor Peeter Scheemaeckers que muy pronto fueron consideradas obras maestras del barroco amberino.

 

Francisco Marcos de Velasco (1635-1693) had a spectacular social ascent from humble noble origins to governor of the citadel of Antwerp (1679) and Marquis of Pico de Velasco (1684).The means that made this possible was his entry into the patronage network of the constables of Castile, through a supposedly common family origin, and his professional career in the army, following other members of his family. He lived during very difficult times for the Hispanic monarchy in Northern Europe. Times in which militiamen flourished, like his antagonist Francisco Antonio de Agurto, as many members of the Spanish nobility retired  or avoided the governorship of Flanders. The Marquis del Pico unsuccessfully aspired to be the governor of the Netherlands and Catalonia. During the many years he lived in Brussels and Antwerp he amassed a collection of Flemish tapestries and paintings, which we know from the auction of his goods. His executors of wills ordered to build a chapel with an altarpiece and a sepulchral monument in the church of the citadel, made by the sculptor Peeter Scheemaeckers, which were soon considered masterpieces of the Antwerp Baroque.