El contenido de una obra puede ser muy diverso, pero la necesidad siempre es la misma: producir un libro con unos estándares mínimos; con suficiente calidad editorial para que los lectores quieran pagar por ese libro y disfruten de leerlo o verlo.

Un original o manuscrito es como un diamante bruto: posee con un enorme valor y es una piedra que hay que trabajar (cortarla, tallarla, pulirla) para sacarle el esplendor que contiene, y presentarla al público sobre una pieza de orfebrería.

Al igual que el diamante, una obra escrita debe atravesar por determinados procesos para sacar el brillo que se merece. Una obra debe seguir unas pautas y atravesar por unos determinados procesos para llegar a convertirse en un libro y Publicar con calidad editorial – Cuatro pilares de la producción de un libro intenta enumerar, detallar y abordar esas pautas para producir cualquier publicación con la mayor calidad posible.

Estos procedimientos se pueden dividir en dos grandes bloques que, a su vez, contienen dos procesos. El primero es la parte creativa del contenido, que abarca la edición del texto y los elementos gráficos, conocida como edición de mesa o editing, y las correcciones: de estilo, de ortotipografía y de pruebas. La segunda es la parte creativa de la forma, integrada por el diseño gráfico y la maquetación o composición, que se aúnan en el diseño editorial.

En cada uno de estos cuatro procedimientos editoriales intervienen distintos profesionales. A lo largo de los capítulos que conforman este libro, se abordan qué hace cada uno de esos profesionales y en qué aspectos deben poner atención, ya sea para crear o revisar el trabajo de otro, o bien para identificar un buen trabajo final.

Se presentan casos prácticos, ejemplos y consejos que abordan aspectos de la edición, la corrección, el diseño y la maquetación de libros complejos, como libros prácticos, de referencia, de texto, enciclopedias, manuales, etc. Se hace hincapié en la edición técnica antes que en la literaria, ya que existe una diferencia abismal en cuanto a tareas y responsabilidades en la edición de un tipo de libro respecto al otro.

En varias partes de este libro hay preguntas antes que respuestas. No se hacen porque no existan contestaciones, sino porque, justamente, esas son las preguntas que debe plantearse un profesional. Son interrogantes que pretenden orientar, hacer ver la diferencia entre una cosa y otra, y tomar partido según corresponda.