Escribir acerca de John Lennon es hablar de un genio con una profunda soledad y obliga a una despiadada honestidad, puesto que el gran músico inglés fue crudamente sincero consigo mismo y con sus seguidores. Tras la primera época de Los Beatles, la de los éxitos comerciales, llevó al grupo a explorar alma y mente para expresar la vida real, el vacío y las necesidades de la humanidad, compuesta por individuos que, o bien se ocultan unos de otros, o bien se dañan en su competencia por alcanzar ilusiones con fundamento monetario. En la última canción que propuso a Los Beatles, “Instant Karma”, se resumen su pensamiento y sus emociones. En ella expresa que, puesto que hemos de morir, más vale que reconozcamos a todos nuestros hermanos y nos ayudemos unos a otros. “Bien, todos seguimos brillando, / como la Luna y las estrellas y el Sol”, dice en el estribillo.
La vida se ensañó con John al permitir que lo abandonaran sus padres cuando él era un niño. Pero ese hecho le haría comprender y amar profundamente a todos los abandonados del mundo, de modo que, cuando estuvo en la cima, dirigió las miradas y el corazón de la humanidad hacia ellos.
En cualquier biografía sobre este músico, es ineludible hablar de su trayectoria artística como miembro de Los Beatles, ya que con ellos estuvo la cuarta parte de su vida y realizó lo mejor de su obra. Por eso en este libro se incluye información acerca de sus vivencias, composiciones y conflictos con sus compañeros de grupo. Estos datos son indispensables para comprender la personalidad de una de las figuras más importantes de la música contemporánea.