Oviedo. Año 2008. Una serie de asesinatos trae de cabeza a la policía. Los cadáveres se deshacen como la ceniza al ser tocados. No hay pistas ni sospechosos.
Gerardo Ulloa es el veterano detective que lleva la investigación. Trabaja solo hasta que le ordenan tener un nuevo compañero: Luis Finisterre, un joven gallego recién salido de la academia. Juntos, combinando los métodos clásicos de Ulloa junto con la nueva perspectiva de Luis, dan con una joven llamada Lucy que sufre unas terribles pesadillas. En esos sueños, alguien trata de ponerse en contacto con ella.
Lo que ni los dos detectives ni la joven Lucy saben es que están metidos en medio de una guerra angelical por el control del cielo y la búsqueda de cinco objetos capaces de librera a Dios de su cautiverio o de mantenerlo encerrado para toda la eternidad.