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註釋A menudo se desprecia al arte contemporáneo porque parece eludir todo juicio normativo. Con sus medios de expresión híbridos y sus inestables límites entre lo que es arte y lo que no, el arte contemporáneo cuestiona no sólo el sistema de las artes sino además la propia inclusión de la obra individual en cuestión. A diferencia de lo que ocurre con las obras de arte tradicionales, ya no parece claro en qué términos debe juzgarse el arte contemporáneo. No extraña que algunos vieran en esto la muerte del arte (y de la Historia del arte). Según esta tesis, ni el arte contemporáneo soporta la comparación con el del pasado ni, por esa misma razón, promete un futuro distinto o mejor. Al contrario, ofrece un eterno Ahora en el que el único criterio que queda parece ser el de lo meramente “interesante”. El simposio interdisciplinar reconsidera la práctica y la naturaleza del juicio estético, ya que los finales del arte no sólo desafían las categorías críticas con las que hemos juzgado las obras de arte del pasado, no sólo exigen que examinemos nuestros criterios de discriminación. Lo que el arte contemporáneo nos urge a hacer es más fundamental: al cuestionar el arte como “institución”, nos obliga a volcar la tarea crítica sobre él mismo. ¿Es posible que sea ahí, en la reflexividad que exige de quienes juzgan, donde el arte contemporáneo alcance una cualidad específica que cabe afirmar como una variante del progreso histórico?