Si bien el trabajo sexual consentido entre adultos no está penalizado formalmente en la Ciudad de Buenos Aires (Argentina), en la práctica las trabajadoras y los trabajadores sexuales están penalizados a distintos niveles, a través de una serie de leyes que castigan las actividades relacionadas con la promoción, la venta y la compra de sexo. Entre ellas está la ley federal contra la trata de personas, que no distingue entre el trabajo sexual.
consentido y la trata de personas con destino a la industria del sexo.