Con el nombre de La guerra de las Galias se conocen los siete libros de Julio César (100 a.C.-44a.C.) que dedicó a contar las campañas desarrolladas durante siete años (del 58 al 52) para someter la Galia Transalpina, realizar una expedición a Britania y reforzar las fronteras con los germanos. A cada año le corresponde un libro escrito con su habitual prosa sobria y cuidada.
Valiéndose de esta obra, Julio César pretendía extender la aureola de su fama explicando de una forma aparentemente aséptica la importancia y dificultad de sus hazañas. Y en este sentido, el hecho de no regatear elogios a sus lugartenientes ni rebajarles los méritos era un medio más de incorporarlos a su causa manteniendo su espíritu de colaboración. Sin embargo, estas pinceladas justificativas tienen poco o nada que ver con la auténtica finalidad de la obra, que no era otra que ensalzar y magnificar unos logros bélicos que le permitieran ponerse a la altura de Pompeyo.
"De un documento oficial como La Guerra de las Galias, el genio Julio César ha hecho uno de los mayores primores de la prosa latina".